• Eduardo Lonardi

    Eduardo Lonardi encabezó el levantamiento contra el gobierno constitucional el 16 de septiembre de 1955, que terminaría en la implantación de la dictadura auto titulada “Revolución Libertadora”. Tras bombardeos a mar del plata y amenazas de bombardeos a Buenos Aires para sacar a Perón del poder, se dio inicio a la “revolución libertadora”

    En cuanto a sus medidas políticas, removió al Procurador vía decreto y del mismo modo fue nombrado Procurador General por Decreto n.º 415 del 6 de octubre de 1955 a Sebastián Soler, quien seguía la idea antiperonista de la dictadura. Se produjo la suspensión del Estado de derecho, de las actividades políticas, partidarias y gremiales y el cese de todos los mandatos electivos. En las provincias los gobiernos fueron intervenidos y de modo similar se procedió con los municipios, la CGT fue intervenida y robaron de su sede el cadáver de Eva Duarte. A pesar que Lonardi tuvo la intención de iniciar medidas tendentes a lograr la "reconciliación nacional", fue obligado a renunciar por los sectores más duros del Ejército y la Armada. Una de las frases destacadas de Lonardi es: “ni vencedores ni vencidos” Las posiciones ideológicas de su gabinete oscilaban en dos extremos: había ministros que adherían a las tradiciones liberal de Argentina, y que se habían opuesto al peronismo desde el primer día y que ahora en el poder, pretendían desmantelar todo el aparato político del peronismo, disminuir el poder de la CGT y reconstruir la vida política sobre la base de partidos políticos sin influencia alguna del peronismo. En el otro extremo había ministros nacionalistas católicos que consideraban a los partidos liberales argentinos como traidores a los valores nacionales. Que en sus orígenes habían simpatizado con las políticas de Juan D. Perón adoptadas en su primer mandato, pero que luego se volvieron adversos al peronismo debido a que consideraban que el segundo mandato del presidente Perón había sido hostil hacia la Iglesia Católica, que realizó un viraje en la política petrolífera y porque se cometieron excesos y actos de corrupción. El mantener relación con los sectores trabajadores, a su vez alianzas con los militares nacionalistas y con los sindicatos, genero conflictos con las fuerzas armadas. Conllevando a su sustitución el 13 de noviembre del mismo año, siendo remplazado por Pedro Eugenio Aramburu.

  • Pedro Eugenio Aramburu

    El pasado 1 de noviembre, Leonardi fue presionado por la Marina y ha sido reemplazado por Aramburu.Tenía como objetivo lograr una “desperonización” de la sociedad argentina por lo que decidió intervenir la CGT, los sindicatos y encarcelar dirigentes políticos y sindicales peronistas. A través del decreto 416,1 impulsó la prohibición del Partido Peronista y de toda referencia a Perón o el movimiento peronista.

    Las medidas económicas que tomara el gobierno de Aramburu se diferenciara en grandes medidas a las del peronismo; se retomaran los postulados del liberalismo económico, se liberalizara el sector externo y se reducirá el rol del Estado. Se apostará a reducir los gastos públicos para aumentar los fondos del Estado, acrecentar los ritmos de trabajo en la industria para incrementar la productividad y exportar más para obtener divisas. Se emprenderá una racionalización de la producción, al tiempo que se congelaran los salarios y las negociaciones entre trabajadores y empleados. El plan, presentado por Raúl Prebisch, consistirá en devaluar la moneda para aumentar la rentabilidad del sector agropecuario. Al mismo tiempo, se eliminará el control de cambios y se desmantelaría el IAPI. Se estima que la Argentina se incorporará al banco mundial y al FMI dentro de los próximos días.En 1958, Aramburu llama a elecciones, donde ganará la UCRI

  • Arturo Frondizi

    Frondizi asumió como presidente el pasado 1 de mayo (1985) liderando el partido UR Intransigente (UCRI) gracias al pacto secreto acordado con Perón; este incentivó a sus seguidores a votar por Frondizi, a cambio de la proscripción del Peronismo. Así, llegó a la victoria con el 45% y la mayoría de los votos en cámara de diputados y senadores.

    Frondizi está programando un plan denominado “Integración”, donde se aspirará a una nueva relación entre trabajadores, empresarios y el Estado. Para esto decretara la Ley de Amnistía, la Ley de Asociaciones profesionales y la derogación del decreto 4161. Permitió el uso de símbolos peronistas no levantó la Proscripción del partido Peronista. También, llevará a cabo el Plan Conintes, que permitirá la intervención de las fuerzas armadas en cualquier tipo de disturbios. Frondizi tiene como objetivo construir un país moderno similar a EEUU o Europa de posguerra. Para esto, va a implementar una política económica llamada “desarrollista”; se expandirá sostenidamente la industrialización. Es necesario centrarse en las industrias básicas y en el aprovechamiento de los recursos energéticos nacionales. En este proyecto, el Estado cumplirá un rol fundamental a través de la protección arancelaria, el otorgamiento de créditos y una política tributaria favorable. Se nacionalizaron las reservas de hidrocarburos, se determinó que YPF fuera el agente encargado de la política petrolera y se estimuló el ingreso de capitales extranjeros para activar la exploración y extracción en los yacimientos. Como resultado, en 1962 prácticamente se alcanzó el autoabastecimiento. En 1958, Frondizi lanzó un Plan de Estabilización y Desarrollo que implicaba liberar el tipo de cambio, reducir el gasto público, restringir las tarifas aduaneras y controlar los salarios. En 1960 y 1961 la política desarrollista logró un importante aumento de la productividad en las industrias. Sin embargo, creció la desocupación (ya que el trabajo industrial intensivo requería menos mano de obra), los salarios disminuyeron y persistió el déficit comercial. Todo el gobierno de Frondizi estuvo atravesado por distintos planteos por parte del ejercito donde se manifestaba su disconformidad. Los dos que se destacaron fueron: en primer lugar, el presidente se entrevistó con el Che Guevara, y esto el ejército no lo podía permitir. En segundo lugar, en 1962 se autorizó la participación del peronismo en las elecciones para las gobernaciones provinciales. El peronismo triunfó. Presionado por los militares, Frondizi anuló esas elecciones, pero no fue suficiente para las Fuerzas Armadas, quienes derrocaron a Frondizi el 29 de marzo de 1962.

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